Ya sabemos, los sindicatos traidores de siempre mejor que nadie, que en los próximos 3 años (entre 2022 y 2024) nos harán perder otro 5,5% de poder adquisitivo, aunque públicamente el devaluado sueldo de los funcionarios se incremente un insuficiente y engañoso 8%, del que un 2% está ya cobrado y añaden, además, a esta fórmula perversa, un 1,5% variable que no vale, ni siquiera, para compensar la inflación de 2022 que cerrará con una subida del 9% en el mejor de los casos. Y todo esto se suma a la pérdida de más de un 20% en la última década; es decir, que nos quitan un 25,5% de poder adquisitivo. Piensan que pueden engañarnos y equivocados andan. Todo lo que no sea partir de una subida del 20%, y no en tres años, sino para ya mismo, es una negociación falsa, es mantener el empobrecimiento, apenas reducido y, por tanto, supone negociar la pérdida.